Increible amabilidad forastera que mitiga la soledad de mi foráneo colega.
Su rayamiento me nubla la mente, su aislamiento me afecta a mi y no encuentro apoyo.
Mi precariedad económica no me permite salir a relacionarme y el aislamiento idiomático con mis companheras de piso no me deja expresar mis sentimientos.
Esta noche oyeron mis lágrimas...y esta manhana una sonrisa de buenos días iluminó mi despertar.
Sólo tengo a mi amor, en la distancia, unidos por fibra de vidrio...
Sólo esas pocas horas frente a la pantalla me hacen sentir querida.
Pero las despedidas son duras... y las noches de tristeza son largas...
Hoy, caminando, recorriendo la ciudad de una institución a otra para solucionar "papeleo"...horas vagando...perdida...
Pero los funcionarios portugueses, aunque lentos, me han devuelto la sonrisa con su carinho y entrega.
Son las 3 de la tarde y regreso a casa, dejando solucionada mi situación en el país.
Pero la nube del futuro laboral incierto y la tormenta que no parece pasar en mi ciudad, me sumieron en el pozo del desasosiego..
El nudo de mi garganta fue deshecho con algo de fruta y ahora, mientras escribo estas letras, sólo deseo cerrar los ojos y dejar que estas horas pasen rápidas...las horas que quedan para poder hablar con mi amor...
Y regresaré después a casa, con los ojos llorosos...
Un día más habrá pasado...
Un día más de superación personal...
jueves, 20 de octubre de 2005
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1 comentario:
Ánimo mi niña...todo saldrá bien mi amor...y recuérdalo siempre..estamos unidos por el maor...no lo olvides...
te amo
M.
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