lunes, 7 de noviembre de 2005

pasan los días...

Mi vida sigue su curso... alegrías, penas, soledades, reuniones, amistades, encuentros, despedidas, paisajes, pesadillas, monotonías, sorpresas, confidencias, pasotismos, súplicas, desesperanzas, frío, hambre, angustia, abrazos, vergüenza, glotonería, lágrimas, dolor, sexo, música, sueño, pereza, ansiedad, curiosidad, esperanza, desilusión, fotografías, sonrisas, responsabilidad, dejadez, escaleras, cuestas, lluvia, fiestas, reservas, sacrificios, teléfonos, rabia, vacío, carcajadas, preguntas, abstracciones, involuciones, desnudez, explicaciones, comprensiones, estabilidades, revoluciones, incompatibilidades, fortaleza, mono, besos, idiomas, miradas, pesos, medidas, suavidad, olores, asco, amor, agotamiento, aislamientos, apoyo...

Estos son mis días, en los cuales giro vertiginosamente hacia un futuro incierto, plagado de esperanza para no morir...

Nunca pensé que pudiera vivir situaciones tan angustiosas como las que estoy pasando, nunca en mi imaginación hubo sitio para estas situaciones límite...

Pero al fin y al cabo, hay algo en mi interior que me dice que todo saldrá bien... o quizá sea el cerebro que, en instinto y mecanismo protector, habla de esta manera para consolar mi mente inconsolable?

Sólo resta luchar y ser consecuente con mis actos (heroicos para algunos, ejemplo d locura para otros...)

En primera línea del abismo, con vistas a la más completa oscuridad, el verde esperanza se difumina día a día tras de mí...

1 comentario:

M. dijo...

Me parece que todo lo que haces tiene un sentido muy bonito, sincero, profundo y puro. Todo lo que haces dices que es por amor y por poder estar juntos, y eso para mi es lo más bonito alquien puede hacer. Eres mi vida y te apoyaré en este camino de espinas que estoy seguro terminará con el brote de una preciosa flor, tu y yo juntos.