sábado, 18 de junio de 2005

Estos 2 días pasaron entre las bambalinas de un teatro en el que improvisaba mi papel.
Dolor en el corazón, desprotección de lo que se pensaba que eran apoyos mutuos.
Conversaciones inacabadas por las punzadas de mi sinceridad hiriente.
Secretos y confidencias en un alma cerrada con candado.
Búsqueda de los sentimientos ajenos, tan poco visibles que parecen no existir.
Desarrollo de una personalidad impropia.
Guión no escrito que revelaba mi estado de ánimo.
Frialdad, fortaleza, soledad, vacío...
Siempre quedarían amistades y/o desconocidos que aplacarían mis ansias de compartir todo mi interior.
Así se lo hice saber.

Pero no puedo, no quiero morir en vida... soy incapaz de fingir lo que no siento; imposible sonreir fingidamente, ser políticamente correcta.

Moderaré mis extremos, equilibraré mis actos.

Un pequeño acercamiento a base de sonrisas cómplices y manos cansadas de no entrelazar sus dedos con los míos...

No quiero pensar en el futuro... dejaré que el cosmos fluya...me abandonaré a su suerte...

Tengo que ser feliz, sola o acompañada, pero tranquila, sin sobresaltos desagradables ni falsas esperanzas.

La tierra gira sobre su eje, y yo me aferro a mis sueños imposibles...

1 comentario:

M. dijo...

me alegro que vuelvas a ser tú misma....


M.