
Vuelve la alegría, la ilusión, las sonrisas, las miradas penetrantes que hablan por sí solas, el retorno a lo perdido, alterando mi ánimo y elevándolo a cotas inimaginables hasta hace poco.
Reencuentro con un "yo" enterrado que resurge de las cenizas y me refuerza.
Vuelta a la consciencia de los latidos de un corazón roto que retoma su origen enamoradizo y me devuelve a una época de plenitud.
Evocación de sensaciones que aniquilé por motivos erróneos.
El monstruo se aleja un paso, y le hago sitio a una emoción incipiente que no sé en qué desembocará...
Yo me subo a este tren... te vienes?????